sábado, 28 de abril de 2007

Björk

I'm a fountain of blood
In the shape of a girl
You're the bird on the brim
Hypnotised by the Whirl

Drink me, make me feel real
Wet your beak in the stream
Game we're playing is life
Love is a two way dream

Leave me now, return tonight
Tide will show you the way
If you forget my name
You will go astray
Like a killer whale
Trapped in a bay

I'm a path of cinders
Burning under your feet
You're the one who walks me
I'm your one way street

I'm a whisper in water
Secret for you to hear
You are the one who grows distant
When I beckon you near

Leave me now, return tonight
The tide will show you the way
If you forget my name
You will go astray
Like a killer whale
Trapped in a bay

I'm a tree that grows hearts
One for each that you take
You're the intruder hand
I'm the branch that you break
(Bachelorette)

jueves, 26 de abril de 2007

Los zapatos del lunes

"La coquetterie est un défaut nécessaire" (Madeleine Ferron)

Miro mis zapatos que he sacado del armario: son preciosos, taquitos, ni altos ni bajos, justo lo suficiente para alargar un poco la pierna, darle una curva más estética a la pantorrilla, al tendón de Aquiles, al pie. Son sencillos, finos y femeninos, de cuero: casi no los he usado, me los compré al final del verano, y como en invierno solo uso botitas, están como nuevos. Con ellos me siento mujer, no, no es eso, me siento mujer linda, y capaz, y este lunes por la mañana, cuando se descompone el baño, cuando me doy cuenta que me olvidé de sacar el basurero a la calle anoche, y que Guy anda rabioso protestando porque no encuentra su tarjeta de comedor escolar, que se le desparrama la leche del cereal a la gorda por haber querido servirse antes del hermano, tironeándole por encima de la mesa el paquete de cereal, decido que es un día para ponerse los zapatos de mujer, linda y capaz.

"O poète, le Verbe est divin ;
De la pure Beauté, le ciel a voulu
Que chacune de nos joies soit issue
Et tout n'est que Poésie." Cantaba d'Annunzio.

Sí, belleza en los pies para vestir el alma.
Subo delicadamente sobre la punta de los pies, hundo mi pie en un ritual de felicidad femenina primitiva, ah, suspiro, qué bien: me siento divina, Perrault sabía de que hablaba. El jean, la camiseta, todo me queda mejor. Además, el día está nuevamente fabuloso, ya van tres semanas de verano en París, el recorrido al trabajo será un paseo encantado, con piernas espectaculares, salgo con mis pies calzados a caminar.
Bajo la cuesta rápidamente, tampoco tengo tanto tiempo para llegar. La nariz alzada miro la calle y el camino, los árboles, las casas, todo me sonríe y me piropea; pienso en la clase que daré, en lo que prepararé para la cena esta tarde, en los pasaportes a renovar, los zapatos me ajustan los pies, en el banco y mi problemón que tarda en solucionarse, voy haciendo listas de cosas que me quedan por hacer en la casa, pintarla por dentro y por fuera, eso sería ya una maravilla, el portón, reparar las persianas, el maldito baño, sí pero que bonita estoy con mis zapatos nuevos, bonita sí, pero cada vez más incómoda; siento que los zapatos me ciñen un poco, me atrapan los pies, los pasos se hacen más lentos, ya se irán aflojando, pienso, y a medida que voy subiendo hacia el otro lado de la cuesta, me empiezan seriamente a apretar. Mis pies me duelen, además recuerdo que ya no hay leche ni pan en casa y que tendré que comprar antes de regresar a casa, ¿cómo me imaginé que podría caminar media hora con zapatos nuevos? Explota una ampolla, ¿cómo supuse que unos zapatos me ayudarían a hacer lo que tengo que hacer? Porque yo sé lo que tengo que hacer, vamos Inés, no te vayas así engañando a vos misma, preferís no hacer nada que pase la vida con la excusa de los chicos, del trabajo, para no terminar nada, sabés lo que tenés que hacer y no lo hacés, el trabajo, a ver hablemos del trabajo, tenés que cambiarlo, encontrar algo que pague mejor, que te guste más, vamos lo sabés y no hacés nada, dejas pasar el tiempo sin moverte, ¿qué le pasó a tu increíble energía? ¿eh? ¿Adónde se rajó? El divorcio, ¿en qué quedó? La casa, ¿la vas a dejar que se desmorone así? Y ¿por qué estás así encerrada? por qué no salís, y te divertís, y ves a gente y dejás de desparramarte por los cuatro continentes, ¿por qué no elegís la vida aquí y ahora, en París? Mis pies están sangrando y no me lo puedo creer. Apenas puedo caminar. Avanzo con pasos sigilosos, suspiro, un cosita por día, una a la vez, así se hacen las cosas, una cosa a la vez. Estoy delante del trabajo, llorando, los zapatos nuevos en la mano, los pies en sangre. Empieza el lunes.

martes, 24 de abril de 2007

Para Carola de Liniers



Porque te recuerdo y te pienso, siempre, con muchísimo cariño. Un beso, Carola hermosa, a vos y a tus carolitos.

domingo, 22 de abril de 2007

Il Ticino: ¡gracias Lucas!

Para mis argentinos suizos, como ella.

¿Y TÚ?
Sí, yo me muevo, vivo, me equivoco;
agua que corre y se entremezcla, siento
el vértigo feroz del movimiento:
huelo las selvas, tierra nueva toco.

Sí, yo me muevo, voy buscando acaso
soles, auroras, tempestad y olvido.
¿Qué haces allí misérrimo y pulido?
Eres la piedra a cuyo lado paso.

Alfonsina Storni

lunes, 16 de abril de 2007

1700 KM de conversación con A.V.

¿Qué se necesita para conducir una ambulancia?: destreza, cautela, valor. Y ahora pongamos que no es solo manejar una ambulancia sino manejarla en 1944, plena guerra mundial, los alemanes peleando cada centímetro de territorio en Francia y sobre todo peleándose por París, no querían perder París. ¿Ya ves? ¿Estás? Imaginemos lo que debía ser aquello: conductor de ambulancia. Sentí como vibra mi Clio, es que ella también se cree un momento vehículo útil en época trastornada como yo me siento valiente hoy sobre las rutas de Francia. Y así se fueron hacia el Este de Francia, a toda velocidad, siguiendo los carros de combate de la Segunda División Blindada del General Leclerc, de las Fuerzas Libres francesas, los que participarían en la liberación de París en agosto y llegarían hasta Berchtesgaden, el "haut lieu" de los nazis, tres días solamente antes de la capitulación de los alemanes. Era la meta, lo que los hizo pelearse duramente en Vittel, Dompaire, Baccarat, paso y no recuerdo todo, pero sí fue lo que les dio la fuerza para aguantar los combates severos en las Vosges, entrar triunfalmente en Estrasburgo y llegar a Alemania. Ah, un detalle: estos conductores eran mujeres. Estoy al volante y pienso en las Rochambelles, las primeras mujeres en participar en la lucha armada durante la segunda guerra mundial, voluntarias, todas, entrenadas y formidables. Estoy manejando desde hace horas, Svizzera ticinesa allá voy, y las recuerdo. Dejame que te cuente mejor. Todo empezó en Nueva York después de la derrota francesa en 1940. Florence Conrad, americana y rica, organizó un grupo de mujeres en los Estados Unidos en 1943 para evacuar los heridos, liberar hombres y permitirles entrar en los combates, fueron reconocidas oficialmente como parte de la Fuerzas Libres francesas antes de salir de los EE.UU. El nombre lo deben al conde de Rochambeau, un jefe de infantería francés que ayudó en la guerra de independencia americana. Conrad era una sentimental. Las Rochambelles llegarían al final de la guerra a ser un grupo de cincuenta y una mujeres, las primeras quince llegaron a Marruecos en 1944. El general Koening, contactado por Florence Conrad, las designó para las 2èmeDB, como se llama aquí a la columna Leclerc, suministrada, equipada y subordinada a la "III rd US Army" del General Patton, Leclerc, a pesar de estar reacio a ver mujeres en el frente no pudo rechazar la oferta de diecinueve nuevas ambulancias para su división, cortesía de Madame Conrad, con la condición de que estas voluntarias soportaran las duras condiciones de entrenamiento del ejercito en África del Norte. Pasaron por el campamento de Hull en Inglaterra --donde se prepararon los voluntarios del mundo entero para pelear contra los Nazis; desembarcaron en Utah Beach, conquistaron metro por metro, herido por herido, la completa y total admiración del General Leclerc que se las llevó hasta la frontera, y más allá, y más allá casi estoy, la veo, estoy llegando; después de largos meses de combate, de una vida completamente fuera de lo común les debe haber costado reintegrarse a la vida civil, en un tiempo cuando las mujeres todavía no tenían el nivel de libertad, de independencia o de acción que tuvieron allí. Pioneras de mi libertad.

Bonjour, passeport, s'il vous plaît.
Le voici.
Où allez-vous, Mademoiselle?
Lugano.
Oh, c'est toujours tout droit, devant vous.
Merci Monsieur, bonne journée.
Bonne journée et bonne route. Bienvenue en Suisse.
Merci, Monsieur.




Les Rochambelles.

miércoles, 11 de abril de 2007

Yodeling, yodel-Ayyyy- Eeeee- OOOO


Dicen que en Suiza la leche tiene otro gusto. Dicen que las vacas suizas son excepcionales, con tanto Alpes, cuidado y atención. Dicen que ... Habrá que ir a ver, eso digo yo.

lunes, 9 de abril de 2007

Jardín: ayer y hoy...



Pinchen sobre las fotos para verlas más grandes: vale la pena. Es hermoso mi cerezo ¿no?

jueves, 5 de abril de 2007

Dulzura

-En clase hoy la maestra nos habló de un descubrimiento francés...
-Ah sí ¿cuál?
-Han descubierto una enzima que podrá transformar la sangre de tipo A, o B, en O.
-Benja, no es transformar, bueno, seguramente habrán encontrado algo que permita neutralizar los antígenos A y B que están sobre los glóbulos rojos...
-¿Antígenos?
-No, nada corazón, es una molécula, algo así como azúcar, La sangre A tiene antígenos A, la sangre de tipo B tiene antígenos B, la O no tiene antígenos. No sé explicarlo, mejor preguntaselo a tu abuelo, yo sé muy poco sobre el tema... ¿Y?
-Nos explicó la maestra que si tenemos sangre de tipo A, solo podemos recibir del tipo A u O, y lo mismo con B. El O es donador universal, puede darle a todos, pero solo puede recibir del grupo O. De ahí la ventaja de tener guardada mucha sangre O.
-Así es.
-Y yo ¿qué tipo de sangre tengo?
-No sé, yo soy del grupo B, tu papá del A, pero depende también de los abuelos, Benja. El tipo de sangre es transmitido genéticamente. Cada persona posee dos genes que nos vienen de nuestros padres, tu abuela siendo O, puede ser que yo sea B/O y tu papá A/O y si por casualidad te transmitimos el O entonces serías O. Uf es complicado. O sea que puedes ser B, A, O o AB, no sé. ¿No quieren terminar de comer?, ¿por qué me hacen a mí esas preguntas, yo que no sé nada del tema? La próxima vez que empiece tu maestra con estas cosas, preguntaselo a ella.
-Vos B, papá A, entonces eso quiere decir que yo soy A o B, o AB...
-Te estoy diciendo que no es tan simple, Benja. Pero ya que lo mencionas: Mimi es AB, es receptor universal, eso significa que puede recibir sangre de todos: A, B y O
- Yo ¡AB!, ¿De todos mamá? .
-De todos, mi amor precioso.
-O sea que ¡mi sangre es la más dulce!
-JAJAJAJA, Mimi sí, tu sangre es la más dulce.


martes, 3 de abril de 2007

3 de abril

(Como te lo expliqué por teléfono, te puse acá un poema difícil, desconocido, un poeta irreconocible. Me gusta sorprenderte mamá. Enseñarte cosas nuevas.)


Mamá, porque yo sé lo que te debo.

Margarita, está linda la mar,
y el viento
lleva esencia sutil de azahar;
yo siento
en el alma una alondra cantar:
tu acento.
Margarita, te voy a contar
un cuento.

Era un rey que tenía
un palacio de diamantes,
una tienda hecha del día
y un rebaño de elefantes.

Un kiosko de malaquita
un gran manto de tisú,
y una gentil princesita,
tan bonita,
Margarita
tan bonita como tú.

Una tarde la princesa
vio una estrella aparecer;
la princesa era traviesa
y la quiso ir a coger.

La quería para hacerla
decorar un prendedor,
con un verso y una perla,
una pluma y una flor.

Las princesas primorosas
se parecen mucho a ti.
Cortan lirios, cortan rosas,
cortan astros. Son así.

Pues se fue la niña bella,
bajo el cielo y sobre el mar,
a cortar la blanca estrella
que la nacía suspirar.

Y siguió camino arriba
por la luna y más allá;
mas lo malo es que ella iba
sin permiso del papá.

Cuando estuvo ya de vuelta
de los parques del Señor,
se miraba toda envuelta
en un dulce resplandor.

Y el rey dijo: "¿Qué te has hecho?
te he buscado y no te hallé;
y ¿qué tienes en el pecho,
que encendido se te ve?"

La princesa no mentía.
Y así, dijo la verdad:
"Fui a cortar la estrella mía
a la azul inmensidad."

Y el rey clama: "¿No te he dicho
que el azul no hay que tocar?
¡Qué locura!¡Qué capricho!
El Señor se va a enojar."

Y dice ella: "No hubo intento;
yo me fui no sé por qué;
por las olas y en el viento
fui a la estrella y la corté."

Y el papá dice enojado:
"Un castigo has de tener:
vuelve al cielo, y lo robado
vas ahora a devolver."

La princesa se entristece
por su dulce flor de luz,
cuando entonces aparece
sonriendo el Buen Jesús.

Y así dice: "En mis campiñas
esa rosa le ofrecí:
son mis flores de las niñas
que al soñar piensan en Mí."

Viste el rey ropas brillantes,
y luego hace desfilar
cuatrocientos elefantes
a la orilla de la mar.

La princesita está bella,
pues ya tiene el prendedor
en que lucen, con la estrella,
verso, perla, pluma y flor.

Margarita, está linda la mar,
y el viento
lleva esencia sutil de azahar
tu aliento.

Ya que lejos de mí vas a estar,
guarda, niña, un gentil pensamiento
al que un día te quiso contar
un cuento.

Ruben Darío, Margarita de Bayle

Feliz cumpleaños y muchos besos.


domingo, 1 de abril de 2007

Boîte à musique

-Adriana, ¿te sabés todas las canciones de la radio?
-Sí
-Lo más gracioso es que no discriminas
-¿Discriminar?
-No, nada, cosas mías. Estabas cantando una de Pink ¿no?
-Sí, me gusta
-Adriana, te gusta todo.
-Todo, todo no.
-Sí, niña, todo.
-Me gusta cantar, Inés
-Lo sé, Drica, está bien, sigue cantando, você é a musica da casa, sabe?
-Así practico el inglés, me gustaría aprenderlo
-Así se hace, Adriana, cantando es un buen método. Hace un rato te oí cantando a Cassia Eller
-Ah, ¡es que me encanta!, la estabas escuchando y me recordó
-Sí, a mí también me gusta
-Esta me gusta también, ¿cómo se llama?
-Sweet Dreams. Es de los Eurythmics, un grupo viejo, te la doy si quieres, la tengo en la compu.
-¿La nueva versión?
-No, la vieja
-Ah, no, deja, me gusta más la nueva
-Vale, pero la vieja es linda también
-...
-Cuando vayas a Brasil, ¿me traerás lo que se canta ahora?
-Por supuesto
-Bien, sos mi radio viajera.
-¿Cómo?
-Nada, una cajita de tesoros, eso, y no discrimines, trae todo todo. Lo haré yo.
-...
-Te voy a echar de menos, Drica.
-Yo también, Inés.