El universo está
lleno de magia y espera, pacientemente, que nuestra inteligencia se afine. Así
es, lo creo y lo vivo.
Me suelen pasar las
cosas de forma abultada, me explico: no me llaman por varios días y cuando digo
varios… de repente, suena el teléfono y es mi hermana, al mismo tiempo suena un
bip alertándome que hay dos personas en la línea, ¿otra persona? ¿de verdad?, y
sí, y ahí no se acaba: aparece un texto de mi hijo, para terminar con esto en
el Facebook me mandan un video. En un espacio de 15 minutos he recibido las comunicaciones
de las dos próximas semanas y cuando digo dos… Así como la nieve que cayó aquí:
la cantidad de medio invierno en dos días. ¿Es de extrañarse, no es cierto? Me
regalan para mi cumple un jabón, es un ejemplo, pasa que sé que recibiré ese
año varios jabones. Concurrencia de intenciones. Me llega una factura, ay, ay, ay, ese día
tendré que pagar un montón de otras cosas. Y no piensen que es porque empieza el mes, y
es normal que se paguen las facturas, no, pasa que ese día se amontonaron la
cosas, eso es. Yo lo llamo conspiración cósmica. El cielo conspira, sí señor,
me llueven las cosas, un día es comunicación, el otro es finanzas, el otro se
atropellan las citas, convocaciones, a veces es el silencio. Nadie viene, nadie
me llama, etc. Ni hablar de los accidentes. Vivo bajo un cielo caprichoso. Las
energías inestables, excéntricas, desproporcionadas. Pensaba que siempre era
molesto, pero no siempre.
1.
Bajando
la calle Saint Laurent desde el estudio de tango hacia la calle Mont-Royal,
paso por unas tiendas donde diviso un local con ventanales, un lugar agradable
donde se ve a personas haciendo cerámica agachados sobre un torno, las manos en
la arcilla. Pensé que le gustaría a Charlie.
2.
En
el momento que llegué a la milonga solo cuatro bailarines estaban allí. Me voy o
espero. Será el cumpleaños de varios me anuncian. Mucho he caminado o sea que me
quedo; bailo con un desconocido, me cuenta que es ceramista.
3.
Ya sé,
para el cumpleaños de Charlie, lo inscribo en un taller de cerámica, le va a
gustar.
4.
Charlie,
¿te gustaría participar en una clase de iniciación al torno de alfarero conmigo.
¡Oh, me dice, siempre he querido hacerlo!
5.
Llamo
a varios lugares, uno de ellos tiene una fecha que nos conviene. ¡Adivinen! Es
el local divisado unos días antes por casualidad.
6.
Ya,
vivan los bultos, las conspiraciones, la magia, los vínculos misteriosos que no
se entienden. A tornear iremos.