So, so you think you can tell
Heaven from Hell,
Blue skies from pain.
Can you tell a green field
From a cold steel rail?
A smile from a veil?
Do you think you can tell?
Did they get you to trade
Your heroes for ghosts?
Hot ashes for trees?
Hot air for a cool breeze?
Cold comfort for change?
Did you exchange
A walk on part in the war,
For a lead role in a cage?
(Pink Floyd, Wish you were here)
-Hola, ¿mamá?
-Benja, estoy en clase, ¿qué pasa mi amor?
-Necesito que pases por el súper después del trabajo y traigas un regalo, hay fiesta en la clase de alemán y me olvidé de decírtelo. Tenemos que intercambiar regalos.
-¿Fiesta? ¿Por Santa Lucía?, ¿en la clase de alemán? pero Benja, es una fiesta sueca, en fin, termino a las ocho, y ... ok, vale, iré cuando termine. Empiecen a comer sin mí.
Por supuesto que a las ocho y cuarto solo queda una cajera para todo el supermercado y la fila es interminable. Miro con incredulidad la cesta del hombre delante de mí, tiene como para un invierno frío, solitario y sueco, el equivalente de una heladera; como estoy cansada la fila parece avanzar a ritmo de caracol francés, o más bien no, como en las películas, la fila se alarga a medida que mi estado de ánimo se funde con mi realidad, cambia, sí, lo veo, se alarga, pienso que nunca saldré de ahí, que es una conspiración para que no coma y no vuelva a casa; la gente se pone a conversar y estoy en la película de Rosemary's Baby, son todos diablos y fantasmas visibles e invisibles que veo y no veo y que me sonríen y me quieren en ese supermercado atrapada, para siempre. De aquí no me iré nunca suspiro en voz casi audible. "Señora", me responde, mi vecina, "el súper cierra a las ocho y media, le aseguro que sí saldrá", no me fío, veo el guardia delante de las puertas impidiendo que entre la gente y abriendo la puerta a los que salen, gota a gota, Dios, mi corazón late un poquito más rápidamente... Quiero volver a casa.
-Son cuatro euros con veinte señora
-Tenga, por favor, señorita
-Ah no, ¿No tiene cambio?
Ay pienso... de aquí no salgo nunca...
Lo único que recuerdo es salir a toda prisa y correr por la noche oscura de mi suburbio, desquiciadamente.